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No
contestes hasta que yo te lo diga.
No
te muevas.
Eres
igual que tu madre.
Limpia
todo esto. ¿No eres capaz de contener tu esfínter mientras te hablo?
Ve
al sótano y diles a tu madre y a tu hermano que vengan. Quiero hablarles.
Un
día de estos me vais a matar.
¡Vamos,
obedece!
Adelita, limpió
su nariz ensangrentada con el dorso de la mano. Avanzó por el largo pasillo con
una frase martilleando en su cabeza, quemando en los oídos.
Llevó sus pasos hasta la cocina. Cogió un cuchillo tan grande como el odio que
profesaba hacía él. Lo clavó en el pecho, mirando fríamente a los ojos de su progenitor, a la vez que musitaba:
- Sí, papá.
... Helado me quedo... Tantísima frustración en tan pocas letras has transmitido...
ResponderEliminarToda una escena de terror y desahogo al final.
Un abrazo, Aurora
La victima siempre lo piensa, pocas veces lo hace.
EliminarGracias Luis, como siempre un placer tenerte por aquí.
Otro abrazo.
Best regards from Paris,
ResponderEliminarPierre
Gracias, Pierre.
Eliminar¡madre mía, que horror! Una historia de malos tratos con final trágico. Lo más terrorífico de todo es que algo parecido sucede en algunos hogares.
ResponderEliminarBreve, pero muy bien contado, no le faltan sentimientos.
Tienes razón, aunque este relato es ficticio, la historia es real en algunos hogares. Una pena!
EliminarAgradezco mucho tu visita, Ángela.
Un abrazo, guapa.
Por muy fuerte que parezca este relato refleja una realidad en algunos hogares. Las víctimas están desamparadas por un estado que no se preocupa por las personas y, en algunos casos, también abandonad@s por la propia familia,vecinos,amigos...
ResponderEliminarEn la desesperación por sobrevivir los seres humanos somos capaces de todo.
Bravo por Adelita!
Un fuerte abrazo, Aurora.
La desesperación, la libertad, el dolor... Sobrevivir a toda costa. Por mi trabajo he conocido casos espeluznantes, y no consigo entender el por qué de ese maltrato. Ojalá hubieran más Adelitas.
EliminarUn placer tu comentario, Ohma.
Un abrazo, corazón.
Aurora, hasta hace muy poco tiempo, los grandes olvidados en las relaciones de maltrato. El sufrimiento y la tensión a la que son sometidos, facilemente, pude desembocar en en una situación com la que relatas. El instinto de supervivencia ante la indefensión, no tenía otra opción.
ResponderEliminarUn abrazo grande
Son los más vulnerables, indefensos... Para un maltratador es la víctima perfecta. Pocos se defienden.
EliminarAgradezco tu paso, Pilar.
Un abrazo, bella.
Los relatos que a mi me gustan y tal como me gustan!!! Enhorabuena mi queridísima amiga...
ResponderEliminarGracias, Manuela. Saberlo es una delicia.
EliminarUn fuerte abrazo, corazón.
Ufffff que duro!! estos son los relatos que te dejan la sangre helada, porque sabes que son realidades. Un micro estupendo Ana!!
ResponderEliminarEs verdad Maite, existen y están hay a la orden del día.
EliminarGracias preciosa, por tu visita.
Un abrazo.
Genial micro que refleja una realidad asquerosa por la que llevamos viviendo una eternidad. Me ha encantado lo conciso y directo que ha sido, Toc.
ResponderEliminarUn besazo "renovado", jajaja...tú ya sabes por qué.
Tristemente vivimos con esta realidad.
EliminarGracias tocaya, tu vuelta es una alegría.
Un abrazo renovado, jejeje.
Tremendo..
ResponderEliminarrealmente impactante. Es un relato muy bien estructurado y escrito!
Agradezco mucho tu comentario, Luni.
EliminarUn abrazo, corazón.
Durete el relatito,eh?? Muy buen micro,amiga...sólo un "pero" para cortos como yo, al decir que lo clavó en el pecho no me queda claro si es en el suyo o en el del papí (supongo que es en el de este último); si es así, quedaría mejor "se lo clavó en el pecho" (ojo,es una opinión, no una corrección, off course)
ResponderEliminarUn saludo,amiga :)
Sí que es duro, sí. Ese pero es bien recibido, amigo. Agradezco mucho esa observación constructiva, ayuda a seguir desarrollándome.
EliminarUn abrazo, compi.
P.D.- Por supuesto que me refiero al papi, jejeje.
No puedo, ni quiero, miro hacia otro, lado porque esa situación que sé que es real, ataca directamente en el "alma" de mi humanidad. Como si ese cuchillo, se "me clavara" a mí. No quiero ni pensar en tropezarme con algo así a la vuelta de la esquina o en la escalera...
ResponderEliminarBicos.
Yo he lidiado con este tipo de situaciones, leer informes y tener delante al niño maltratado, es duro. Mirarle su carita, y preguntarte ¿qué es lo que provoca?
Eliminarporque a mí sólo me inspira ternura e indefensión.
Nunca lo entenderé.
Gracias por tu paso, Fonsilleda.
Un abrazo.
Auroratris...
ResponderEliminarLo que escribistes (siempre lo haces!) nos toca el alma.... La situación es mismo una realidad en todo el mundo.... y el cuchillo es parte de nuestros pensamientos.... Muy lindo y muy fuerte tu post.
Un lindo grito de libertad.
Gracias por la amistad duradera!
Me ha gustado eso que dices de que el cuchillo es parte de nuestros sentimientos. Tienes razón.
EliminarGracias por tu paso, Integral.
Un abrazo.
Guauu..! no me lo esperaba. Me ha impactado, desde luego, sacude.
ResponderEliminarFuerte porst,eh???
EliminarGracias corazón, tu visita es un regalo.
Un abrazo, amiga.
Very cool blog. Interesting posts. ;)
ResponderEliminarNice atmosphere guests with you here on the blog. ;]
Yours. Have a nice day. !
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I'm very concerned about this, please. :)
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Gracias, Patrycja!!!
EliminarUn placer verte por aquí.
Un saludo.
Buenísimo!!! La verdad que se lo tiene ganado, es que mientras lees te dan ganas de que reaccione, y lo hace...
ResponderEliminarMe gustó mucho.
Besos, que tengas un lindo fin de semana
Sí que se lo ganó a pulso. Los niños son los más indefensos, pobres!!!
EliminarGracias Eva, que tengas un buen finde, guapa.
Un abrazo.
Triste y duro, como la realidad que reflejas.
ResponderEliminarBesos siempre, compañera de tantas horas y tantas vivencias.
Durísimo cuando sabes que está ahí, a la vuelta de la esquina, en cualquier hogar, en cualquier lugar.
EliminarUn fuerte abrazo, compañera mis pasos.
Los malos tratos en muchas ocasiones acaban muy mal, y en estos tiempos que corren más.
ResponderEliminarUn abrazo
Isabel
Siempre acaba habiendo una vencedor y muchas victimas.
EliminarNo debería ocurrir nada de lo que actualmente está a la orden del día.
Un placer tenerte por aquí.
Un abrazo, Isabel.
Yo alegaría defensa propia. A ver quién osa discutirlo...
ResponderEliminarBesos
Yo también, Trini. Los niños y su inocencia, hay que salvarla. Son nuestro futuro.
EliminarMe alegra tu regreso después de esa pausa.
Un abrazo.
Amiga... He venido acá en búsqueda de tus nuevos escritos... Entonces he leído de nuevo ese post.... Me lo gustó tanto que hoy leyendo los comentários lo veo más fuerte y aún más precioso.
ResponderEliminarGracias por tus siempre dulces palabras em mi blog. Vuelva a postar algo nuevo para el delírio de todos nosotros que te gustamos tanto!
Besos cariñosos desde Brasil!
Me halagan tus palabras.
EliminarGracias Integral.
Un abrazo.
Que palabras, es triste la historia, pero narras la cruda realidad.. Me gusta el vocabulario que utilizas debería aprender de ti!
ResponderEliminarSaludos, no dejes de escribir!
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Dura esta realidad que nos rodea, es verdad.
EliminarGracias por tu comentario, es todo un halago.
Un abrazo, Sylvia.
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